En virtud de las recientes modificaciones de la Ley Nº 1462, que establece un nuevo rango de alícuotas al ICE (Impuesto a los Consumos Específicos), en productos como bebidas alcohólicas y no alcohólicas, , la Cámara de Industria, Comercio, Servicios y Turismo de Santa Cruz – CAINCO reunió a un grupo de especialistas y empresarios del sector productor y comercializador de bebidas, para analizar sus efectos adversos a la industria nacional, el comercio formal y a la economía nacional.
El conversatorio sectorial se llevó a cabo el martes 27 de septiembre, con la participación de Fernando Hurtado – presidente de CAINCO, Jean Pierre Antelo – presidente de la Federación de Empresarios Privados de Santa Cruz, Santiago López – Director Ejecutivo para América Latina y el Caribe de International Council of Beverages Associations, Esteban Ortiz – investigador científico y especialista en salud pública de Ecuador, Ibo Blazicevic – director de Asuntos Corporativos y Legales de la Cervecería Boliviana Nacional, y Juan Carlos Torrico – Secretario Ejecutivo de la Federación Departamental de Trabajadores Fabriles de Santa Cruz.
“Las empresas necesitan incentivos y menos presión tributaria. Sin embargo, con este tipo de medidas lo único que vemos es que se disminuyan las importaciones oficiales y los pequeños importadores formales migren al sector informal”, expresó Hurtado.
Fruto del intercambio de criterios técnicos los especialistas coincidieron en que la Ley Nº 1462 es excesiva, ambigua, discrecional e incentiva al contrabando. Ya que, modifica las alícuotas del ICE de bebidas alcohólicas y no alcohólicas ejerciendo mayor presión tributaria a las empresas formales.
Actualmente se estima que el ingreso ilegal de cerveza al país anual, asciende a 81 millones de litros, lo que representa 75 millones de dólares. Asimismo, el contrabando de bebidas no alcohólicas es de alrededor de 50 millones de litros lo que significa 37 millones de dólares.