Por Javier Olmos, gerente de distribución nacional en Avícola Sofía Ltda.
Voy muchos años en el sector logístico y no recuerdo haber realizado lo mismo, a pesar de que sigo en el mismo rubro y en la misma industria. Es un hecho como van cambiando los enfoques y las prioridades dentro de la Cadena Logística. Los factores que inciden en estos cambios pueden ser de origen interno, ya que los procesos van “madurando”, o pueden ser de origen externo, que básicamente están relacionados con el mercado, la competencia y los clientes. En la mayoría de las veces ambos factores ejercen al mismo tiempo tal presión, que se convierten en un crisol de los procesos.
Por ejemplo, en el área de Almacenaje, el desafío inicial es el de tener control sobre las existencias, es decir, minimizar primero las diferencias de inventarios, considerando lo que está en Sistema vs lo que tenemos en físico. Aparentemente algo tan básico se puede convertir en un dolor de cabeza, si no tenemos procedimientos de control correctos, inventarios cíclicos y un personal altamente capacitado. Salvando este tema nos encontramos con nuevos desafíos, tales como, la correcta rotación de productos, optimización de picking, direccionamiento de productos por canales, productividad hora/hombre, minimización de recorridos dentro de almacenes, automatización, implementación de softwares de administración de almacenes (WMS), etc.
En el área de Transporte, específicamente entrega local a clientes, el enfoque inicial es que la entrega se efectivice. El hecho de llegar al cliente, realizar la entrega y cobrar, representa un logro porque va generando el ingreso de dinero esperado por la empresa. Sin una planificación correcta, acompañado de un seguimiento de indicadores, esta actividad puede verse truncada, generando ineficacias y obviamente insatisfacción en los clientes. Los siguientes pasos lógicos una vez controlado lo básico, es enfocarse en el control de las devoluciones, seguimiento de retornables, optimizar rutas para ganar tiempo en los recorridos, estandarización de pasos de entrega para conseguir una eficiencia, seguimiento de uso de capacidad de carga, cumplimiento de secuencias, disponibilidad de diversas opciones de cobranza, etc.
La base para poder afrontar tantos cambios se centra en tener una planificación detallada de la Cadena Logística, que esté totalmente integrada y basada en los objetivos comerciales. Un elemento adicional muy importante es la capacitación y actualización del recurso humano, que permita ejecutar lo planificado y adaptarse a los desafíos que se presenten para cumplirlos. La mano de los lideres o jefes en estos procesos, son muy importantes para la mejora continua, ya que no solo direccionan los recursos y se convierten en un faro de toma de decisiones, si no que aportan el combustible necesario para efectivizar los cambios: la inspiración y/o motivación.
Las dificultades adicionales que se nos presentan a los que trabajamos en el sector logístico de Bolivia, nos hacen en cierta forma más “adaptables” al cambio. Nos enseña y obliga a pensar en alternativas de soluciones en tiempo record, para sacar adelante una operación. Un claro ejemplo y que no se da en otros países (por lo menos con tanta frecuencia) son los bloqueos de carreteras por conflictos sociales. Este es el pan de cada día para las empresas que tienen importaciones, exportaciones o simplemente abastecimiento a otras ciudades. Las operaciones que quieren marcar diferencia, no se quedan de brazos cruzados, ya que tienen identificadas todas las posibles rutas alternativas, incluso las que ni aparecen en los mapas. Cuando se trata de alimentos o producto perecederos las alternativas obligatoriamente tienden a incrementarse. Al cuarto o quinto día de un bloqueo que se perfila para más tiempo, es muy normal ver a empresas que trabajan normalmente con envíos terrestres, gestionando y enviando mercadería vía aérea. En lo personal, después de tantos envíos aéreos, considero que nuestra curva de experiencia se encuentra elevada, teniendo ya a mano empaques alternativos, preacuerdos con compañías aéreas, y personal capacitado para operar una logística aérea totalmente diferente a la tradicional terrestre. Efectivamente es un costo elevado que no todos los rubros pueden darse el lujo de incurrir, pero para ciertos productos y con convenios prestablecidos con clientes para que asuman parte del costo adicional, este tema se puede viabilizar.
Es muy importante para las empresas y sobre todo para las Operaciones Logísticas, contar un Plan de Continuidad, donde se analizan todos los posibles riesgos que puedan afectar a una operación, y sus posibles acciones correctivas para cada uno de los riesgos identificados. Entre los riesgos se deben considerar incendios, convulsiones sociales, bloqueos, quiebre de máquinas claves, falta de combustible, hasta riesgos menos probables, como terremotos e inundaciones.
En los últimos años he sido parte de este proceso de definición del Plan de Continuidad, y confieso que nunca habíamos considerado una Pandemia provocada por un Virus. Esta situación que venimos viviendo desde hace poco más de un año, realmente cambió las reglas del juego para todos los sectores de las empresas, aún más para las Operaciones Logísticas. Como hemos venido desarrollando en este articulo, queda bajo nuestra responsabilidad adaptarnos como lo hemos venido haciendo, con todos los cambios y mejoras en nuestros procesos. La clave está en hacerlo rápido. Entiendo que para las empresas grandes puede ser más difícil, pero situaciones extremas ameritan decisiones extremas. No dudemos un minuto para tomar decisiones drásticas y hacer cambios estructurales.
En estos nuevos tiempos las empresas estáticas tienden a perder participación de mercado y en el peor de los casos cerrar. Es momento para las empresas de considerar cambios en el modelo de servicio comercial, introducirnos en la transformación digital, crear nuevos SKUs, lanzarnos de lleno a la omnicanalidad, incrementar nuestra flota de transporte, tercerización de procesos que no son “core”, invertir en nueva tecnología que nos permita ser más eficientes, etc. Nosotros como Operaciones Logísticas debemos acompañar estos cambios, haciendo modificaciones en nuestros procesos, cambiando el enfoque de hacer las cosas. Lo hemos venido haciendo, es nuestra naturaleza.