El artículo elaborado por el Centro Boliviano de Estudios Económicos de CAINCO – CEBEC muestra diversas facetas del crecimiento económico y desarrollo de la República Popular de China de las últimas décadas y describe los desafíos y la orientación de política actual.
China fue cuna para una de las más grandes civilizaciones en la historia de la humanidad. La Gran Muralla, los guerreros de terracota y el Palacio Imperial son algunos de los testigos. Después de más de tres décadas de aplicada la política de reforma y apertura, China no sólo consiguió el despegue de la economía, sino que logró posicionarse como la segunda mayor economía del mundo. Este artículo explora diversas facetas de esa realidad y explora, en la parte final, algunos puntos que pueden guiar la política pública en el país.
LA REFORMA Y APERTURA
La República Popular China creció gracias a la aplicación de reformas a su economía y una política de apertura al exterior. En 1978 inició la reforma al régimen económico y emprendió –de manera paralela– la apertura al exterior de modo gradual y planificado. Desde 1980 estableció en el litoral cinco zonas económicas especiales de apertura al comercio. Paulatinamente, incorporó a esta iniciativa ciudades de la costa y algunas ciudades fronterizas, capitales de provincias y regiones autónomas. Las ciudades “abiertas” se distribuyeron por todas las provincias y regiones de China. En el año 2000 inició el desarrollo del oeste de China que incluyó varias provincias y regiones autónomas. En 2003 inició el impulso a la zona del nordeste y otros viejos centros industriales. Antes de la política de reforma y apertura, esta zona fue el centro industrial más importante y una de las zonas más desarrolladas del país. En 2004 se planteó la estrategia de despegue del centro. Esta estrategia se destinó a elevar la capacidad de producción de cereales de la zona central, formar bases para la explotación de materias primas, al tiempo de estructurar un sistema integral de transporte. En la última década estableció la zona experimental de libre comercio de Shanghái, Guangdong, Tianjin y Fujian.
A partir del ingreso de China a la OMC, el gobierno chino profundizó el alcance de la apertura desde el comercio tradicional de mercancías hasta el de servicios; estandarizó el acceso a mercados, mejoró el marco legal y la transparencia. Por su parte, la Inversión Extranjera Directa creció de manera sostenida. Desde la década de los ochenta la Asamblea Popular Nacional y el Consejo de Estado promulgaron sucesivamente leyes y reglamentos relacionados con la inversión proveniente del exterior. Este marco proporcionó garantía jurídica a los empresarios extranjeros en sus inversiones en China. En la actualidad, China es considerada como uno de los países con mejor ambiente y mayor potencial de desarrollo para inversiones.
Actualmente se sienten los efectos de aglomeración generados por los grupos de ciudades y el desarrollo de zonas económicas. Estas zonas se desempeñaron como modelo de una economía orientada hacia el exterior, de creación de divisas por exportaciones y de introducción de tecnología. China promueve la libertad del flujo de productos, servicios e insumos para la producción. Existe libertad de comercio y de movilidad capitales. En la actualidad, es considerada como una de las economías en vías de desarrollo con mayor potencial en el mundo.
DINAMISMO Y PERSPECTIVAS DE ALGUNOS SECTORES ECONÓMICOS CLAVE
El sector de la agricultura. China cuenta con sólo el 7% de las tierras cultivadas del mundo y cuenta con el 20% de la población. Sin embargo, ha logrado resolver el problema de alimentación de su población. La Llanura del Nordeste, del Norte de China y de los Cursos Medios e inferior del Changjiang, el Delta del Zhujiang la Cuenca del Sichuan son las principales zonas agrícolas de China. La primera produce abundante trigo, soya, sorgo, lino y remolacha. En la Llanura del Norte se produce trigo, maíz y algodón. La llanura de los Cursos Medio e Inferior del Changjiang es la mayor zona productora de arroz. En esta zona, abundan también variedades de té y gusanos de seda morena. La Cuenca del Sichuan es conocida como el “país del palacio celestial” pues tiene un clima templado y húmedo que propicia la actividad agrícola especialmente de arroz y caña de azúcar, durante las cuatro estaciones del año. En el Delta del Zhujiang, se cultiva arroz, llegando la cosecha a dos o tres veces en el año.
China tiene más de 900 millones de campesinos, por lo que el gobierno considera la solución de los problemas de este sector una tarea clave. La reforma estableció un sistema de doble vía basado en la responsabilidad familiar bajo contrato con remuneración vinculada a la producción y abrió en todos los sentidos el mercado de productos agrícolas. Anuló los impuestos agrícolas y ofreció subsidios directos a los campesinos, formando un sistema económico rural que se adapta a las condiciones propias del país. Se establecieron y ampliaron los sistemas de seguro rural y asistencia médica cooperativa y se dedicaron grandes esfuerzos a la educación obligatoria en zonas rurales. Como resultado, la producción de algodón, oleaginosas, frutas, carnes, huevos, productos acuáticos y hortalizas ha crecido de manera continua y ocupa los primeros lugares a nivel mundial.
El Sector Industrial
Materias primas. Todos los minerales conocidos en el mundo se encuentran en China con abundantes reservas. De los 172 minerales que se han encontrado, las reservas de (al menos) 20 minerales figuran entre las mayores del mundo. En particular, las reservas de tungsteno, estaño, antimonio, tierras raras y grafito ocupan el primer lugar en el mundo. Son también abundantes las reservas de petróleo, gas natural y pizarra bituminosa.
Industria de Equipos. Este sector es uno de los de mayor contribución a la industria en China. Su valor de producción ocupa aproximadamente 1/3 de la producción global. Entre los sectores que han logrado evidente progreso se puede mencionar: la industria de equipos inteligentes, de energía, la industria marítima, de equipos avanzados de transporte sobre riel y de automóviles impulsados a energía renovable.
La industria de productos de consumo. El país se encuentra primero en la producción de más de cien productos, entre los que se destaca la bicicleta, la máquina de coser y cerveza. La cuota de productos electrodomésticos, de cuero, pluma, muebles, cerámicas y bicicletas supera el 50% en el mercado internacional. Los textiles gozan de fama mundial, en lo referente a la producción de fibra química. La producción de seda ocupa el primer lugar en el mundo. La industria textil constituye uno de los sectores con mayor competitividad internacional de China.
Industria de navegación espacial. China ha logrado avances significativos en la investigación, producción y lanzamiento de satélites. Durante las últimas décadas, ha adquirido el dominio de la tecnología para el lanzamiento y recuperación de cohetes y satélites, así como el monitoreo y control de éstos en su órbita estacionaria. El lanzamiento exitoso de la nave espacial tripulada X y el Módulo Espacial Uno demuestran que China ha ingresado exitosamente en la etapa de investigación y producción de laboratorios y estaciones espaciales.
Industria de la informática. Este sector es uno de los pilares de la industria China. La producción de terminales inteligentes móviles y el consumo de la información creció a alta velocidad. Actualmente, proyectos prioritarios como los de circuitos integrados, de pantallas planas, de terminales inteligentes, de computación en la nube e internet móvil progresan a paso firme.
La Industria de Servicios
Industria del transporte. En los últimos años las redes y las líneas de transporte, así como el volumen total de transporte de pasajeros y mercancías aumentó rápidamente. El desarrollo de infraestructura vial y caminera se enmarca en el Plan Nacional de Redes de Autopistas. China está construyendo una red nacional de autopistas caracterizadas por la conexión de la capital nacional con las capitales de las provincias y regiones autónomas.
La calidad, cobertura y velocidad de la construcción ferroviaria de China alcanzó niveles sin precedentes. China ha construido a gran escala vías férreas de alta velocidad. Se ha completado una red de transporte ferroviario de alta velocidad formando un círculo de alta velocidad con la ciudad de Beijing como centro. En el ámbito urbano, el gobierno ha reforzado la construcción de ferrocarriles para aliviar las presiones del tráfico. Se espera que los ferrocarriles urbanos, metros y otras vías sobre rieles conformen un sistema de tráfico urbano de alta velocidad entrelazado, capaz de asumir entre 50 y 80% del volumen del transporte público entre ciudades.
China ya tiene construida una serie de puertos de gran envergadura a lo largo de las vías de navegación. La industria portuaria es la fuerza motriz para el desarrollo de industrias adyacentes a los puertos y la economía regional. Varios puertos chinos figuran entre los más grandes del mundo en el transporte de contenedores. El puerto de Shanghái está considerado como el mayor del planeta.
Las líneas y la red de aviación civil se han perfeccionado en las últimas décadas. En la actualidad existen más de doscientos aeropuertos de aviación civil y se ha mejorado la capacidad del servicio y la puntualidad de los vuelos. Destacan Air China, China Southern, China Eastern y Hainan Airlines, que son compañías estatales.
Sistema Financiero. China ha formado un sistema financiero sólido. El Gobierno Central efectúa, a través del Banco Central, la regulación y control macro-prudencial, al igual que la supervisión a nivel micro. El Banco Popular de China ejerce también la función de administrar la política monetaria, de administrar las reservas y de emitir dinero. La moneda de curso legal es el Renminbi, que significa “la moneda del pueblo”, cuyo precio respecto a otras monedas es definido por el Banco Central.
China cuenta con más de cien bancos comerciales urbanos, cien mil sociedades de crédito urbanas y un gran número de sociedades de crédito rural. Como resultado de la política de apertura, más de doscientos bancos de capital extranjero desarrollan sus negocios en China. Operan en el sistema un conjunto de bancos estatales bajo la lógica de “división del trabajo”. Existen bancos de propiedad estatal comerciales y con orientación de política. Cuatro bancos estatales se sitúan entre los bancos más importantes del mundo respecto su valor de mercado, rentabilidad, capital y volumen de ahorro. En los últimos años, varios bancos estatales cumplieron con la iniciativa de reconversión hacia un sistema de acciones que cotizan en las bolsas de Hong Kong y Shanghái.
El mercado bursátil se ha convertido en las últimas décadas en uno de los más importantes canales de inversión. La emisión, compra – venta y liquidación de valores se realizan desde distintos lugares debido a que se opera en un mercado completamente desmaterializado.
Turismo. La industria sin chimenea ha impulsado el crecimiento y el desarrollo de China de manera importante. China es el tercer país receptor de turistas extranjeros con una estancia mínima de una noche cada año. Dispone de 110 ciudades de renombre cultural y posee una cultura milenaria. Tiene un potencial turístico basado en ciudades turísticas. Cincuenta y seis grupos étnicos, sus costumbres y hábitos hacen para el visitante extranjero una experiencia única.
HACIA DÓNDE VA CHINA: Camino de la Industrialización del nuevo modelo
Actualmente China logró armonizar una estructura económica a partir del refuerzo a la industria básica, la construcción de infraestructura y el desarrollo de la industria ligera. Tiene también edificado un sistema industrial moderno integral que abarca la industria de materias primas y energías, de equipos, de artículos de consumo, de ciencia y tecnología de defensa, de información, de electrónica y ricas cadenas complementarias. En este sentido, el sistema económico sigue siendo el punto prioritario de la profundización integral de la reforma.
El problema central actual es encontrar un equilibrio armónico entre el rol del gobierno y el mercado para que el primero desarrolle su función correctamente y el segundo desempeñe su papel decisivo en la distribución de recursos. En este sentido, en el ámbito público se han concentrado esfuerzos en reforzar y desarrollar la economía de propiedad pública, profundizar la reforma de las empresas estatales y garantizar que ellas disfruten de la igualdad en la utilización de los elementos de producción, la equidad en la participación en el mercado y la igualdad en la protección de la ley.
La aceleración del cambio de la modalidad de desarrollo económico de China pasa por el reajuste estratégico de la estructura económica. Este reajuste tiene las siguientes metas:
- La ampliación de la demanda interna de manera duradera.
- El desarrollo de la economía real: impulsar el sano desarrollo de la industria emergente estratégica, la industria manufacturera avanzada y acelerar la actualización de la industria tradicional.
- Elevar las fuerzas competitivas de las empresas grandes y medianas, apoyar el desarrollo de las microempresas, en especial de las microempresas de base científica y tecnológica.
- Continuar la ejecución de la estrategia general de desarrollo regional y poner en pleno juego las ventajas relativas de las diferentes regiones. Planificar de manera científica el tamaño, la distribución y concentración de las ciudades, la absorción de empleo, así como otras funciones de ciudades medianas y pequeñas.
- El comercio exterior se orienta a multiplicar los socios comerciales con una mayor participación de mercados emergentes, una distribución regional más equilibrada, una estructura racional con menor peso de las empresas no gubernamentales y dependencia de las empresas de inversión extranjera y, una estructura más óptima de mercancías importadas y exportadas.
China mantiene el desarrollo científico como un tema principal. Se ha puesto gran energía en a. incrementar la fuerza motriz de la innovación y el desarrollo, y en estructurar un sistema de desarrollo industrial moderno; b. aumentar el potencial de desarrollo a largo plazo basado en la industria de servicios moderna, el progreso de la ciencia y tecnología y la elevación de la cualidad de los trabajadores; c. la innovación, la economía circular y la interacción del desarrollo y coordinación regional entre ciudad y el campo; y d. aprovechar las ventaja de una economía abierta. Una nueva frase “Inventado en China” está sustituyendo al “Hecho en China.” Su significado va más allá del simple trabajo físico y expone la creatividad intelectual.
China tiene como objetivo también desarrollar el sistema industrial de tecnologías de la información, perfeccionar el sistema de seguridad de la información y generar un amplio uso del Internet.
Se ha enfatizado la industrialización del nuevo modelo con peculiaridades chinas, caracterizado por un alto contenido científico y tecnológico y una mejor eficiencia económica, un bajo consumo energético, una menor contaminación ambiental un pleno desarrollo de los recursos humanos.
Al entrar en una nueva etapa de desarrollo China encarará una nueva estrategia de desarrollo propulsado por la innovación. Esta consistirá, entre otros aspectos, en promover la integración de la ciencia y la tecnología con la economía, dedicar mayor energía a estructurar un nuevo sistema de innovación técnica, en el cual las empresas son los cuerpos principales, el mercado la guía y se combinan la producción, el estudio y la investigación.
REFLEXIONES FINALES
El crecimiento económico y desarrollo de China ilustra varios aspectos que pueden contribuir a mejorar las políticas públicas. En primer lugar, un desarrollo planificado, focalizado, basado en las potencialidades particulares de la región y paulatino. China desarrolla distintas regiones de su territorio en este sentido durante los últimos treinta años. En segundo lugar, la sinergia entre el máximo provecho de sus factores en abundancia y los beneficios de la apertura económica y el comercio exterior. En tercer lugar, en China, parece que no está nada escrito de una vez y para siempre; ya que –como se ilustra en el desarrollo de la normativa para la inversión extrajera directa– la política parece ser que se está siempre en proceso de mejoramiento. En esta misma línea, en cuarto lugar, consigue lograr que los recursos externos sean más bien aliados orientados al crecimiento y bienestar, antes que competencia con los escasos recursos nacionales. En quinto lugar, antes que focalizar y concentrar esfuerzos en sectores estratégicos, la evidencia parece indicar que más bien impulsa un desarrollo de base amplia desde la agricultura, las diversas industrias – en las que destaca el sector transporte – y los servicios, orientándose más hacia un tipo de desarrollo que destaca las complementariedades. En sexto lugar, no niega los beneficios del mercado libre como mecanismo para asignar recursos, sino más bien busca sanos equilibrios entre las libertades del mercado y el rol de sector público orientado a corregir ciertas fallas. Finalmente, cabe destacar en el proceso de planificación y mejora continua de las políticas de desarrollo la ausencia de un refundacionalismo crónico que genera en muchos casos un uso no eficiente de recursos escasos.