Con una visión clara de sostenibilidad, la empresa ha forjado un liderazgo indiscutible en Bolivia, apostando por la economía circular como pilar fundamental de su desarrollo. Lejos de ver el reciclaje como una alternativa más, lo han convertido en el núcleo de su estrategia empresarial, demostrando su impacto tanto en el crecimiento económico como en el cuidado del medio ambiente. En esta entrevista exclusiva, Carlos Limpias, gerente general de Empacar, nos comparte los hitos más importantes de su trayectoria, su compromiso con la reducción de emisiones de CO2 y los planes que tienen para seguir innovando en el futuro.
Hitos que delimitaron el rumbo de Empacar
Desde su fundación, Empacar ha adoptado un enfoque disruptivo. Pero el verdadero punto de inflexión ocurrió en 2009, cuando la empresa dio el salto hacia el reciclaje de botellas PET. Esta decisión no solo transformó su modelo de negocio, sino que también introdujo un enfoque innovador que le permitiría crecer de forma sostenible. “Desde ese momento, la sostenibilidad se convirtió en el núcleo de nuestras decisiones, fusionando lo económico con lo ambiental“, mencionan los directivos.
Un segundo hito relevante llegó en 2016, cuando Empacar decidió abrir las puertas del reciclaje a la comunidad a través de programas educativos. Instituciones y colegios se unieron a esta iniciativa, creando una cultura de reciclaje que no solo fomenta la conciencia ambiental, sino que también genera beneficios económicos para los participantes. Al involucrar a miles de recolectores y comunidades en sus operaciones, Empacar se ha consolidado como un referente en la industria de reciclaje en Bolivia.
“En 2018, dimos otro paso significativo: integrar cartón reciclado en nuestras líneas de producción de cajas de corrugado”, explicó. Este cambio permitió que la empresa aumentara drásticamente la cantidad de cartón recolectado de 40 toneladas a más de 850 toneladas anuales, demostrando que un enfoque sostenible puede ser rentable. Hoy, Empacar es capaz de reciclar el 100% de las botellas PET generadas en el país, un logro sin precedentes.
Economía circular: Más que un concepto, una realidad
Para Empacar, la economía circular no es solo una tendencia, sino el corazón de su negocio. “No solo reciclamos materiales, sino que buscamos maximizar la eficiencia en cada etapa de nuestra producción”, afirmó. Un ejemplo de esta filosofía es la creación de nuevas líneas de productos a partir de residuos industriales, como sillas y mesas fabricadas con resinas recicladas.
Pero la sostenibilidad en Empacar no se detiene en el reciclaje. La empresa ha adoptado tecnología de punta que reduce al mínimo las emisiones y maximiza el uso de materias primas. Además, han implementado paneles solares en sus oficinas administrativas, una prueba más de su compromiso con la eficiencia energética. Cada paso que dan está alineado con su visión de futuro: crear productos de calidad que, al mismo tiempo, minimicen el impacto ambiental.
Cifras que hablan: El impacto ambiental de Empacar
Los resultados de las iniciativas de Empacar son tangibles y cuantificables. Entre 2019 y 2023, la empresa mitigó 162.187,95 toneladas de CO2, lo que equivale a retirar 92.000 vehículos del parque automotor durante ese mismo período. Esta reducción masiva de emisiones es producto de su enfoque en el uso de materiales reciclados y la optimización de procesos.
“No solo somos una empresa Carbono Zero, tenemos un balance positivo”, destacan con orgullo. Gracias a su capacidad de mitigar 4.68 veces las emisiones que generan, Empacar es un ejemplo vivo de cómo las industrias pueden adoptar modelos sostenibles y aun así ser competitivas y exitosas.
Innovación continua: Nuevos proyectos para el futuro
Empacar no se detiene en los logros obtenidos hasta el momento. Este año, la readquisición de Kupel, una fábrica de papel higiénico, servilletas y toallas de cocina, marca otro hito importante en su historia. “Nuestro ADN de reciclaje se originó en esta fábrica”, explican los directivos, y ahora buscan integrar esta operación en su red de acopio de plásticos, cartón y papel, reforzando su liderazgo en el sector.
Además, continúan explorando nuevas formas de aprovechar residuos y desarrollar productos innovadores. Este espíritu visionario les ha permitido mantenerse a la vanguardia y contribuir al desarrollo sostenible del país.
“Las decisiones sostenibles no solo son buenas para el medio ambiente, sino que también traen beneficios económicos y ayudan a las empresas a ganar aceptación en el mercado”, concluye.